Un hombre de Luisiana se declara culpable de prender fuego a tres iglesias bautistas en la Parroquia de St. Landry

Holden Matthews, de 22 años, se declaró culpable hoy en el Distrito Occidental de Luisiana de prender fuego intencionalmente a tres iglesias bautistas por motivo del carácter religioso de esos edificios. En concreto, Matthews se declaró culpable ante tres cargos de vulneración de la ley de Prevención de Incendios Provocados en Iglesias, Sección 247(a)(1) del Título 18 del Código de los EE. UU. —un cargo por cada iglesia— y un cargo de uso de incendio para la comisión de un delito federal, lo que contraviene la Sección 844(h) del Título 18 del Código de los EE. UU. Los incendios, que Matthews provocó a lo largo de un período de diez días entre marzo y abril del 2019, destrozaron completamente a cada una de las iglesias.

En la audiencia en la que se declaró culpable, Matthews admitió que entre el 26 de marzo y el 4 de abril, provocó incendios intencionalmente en tres iglesias bautistas, cuyas congregaciones son mayoritariamente afroestadounidenses, en la zona de Opelousas, Luisiana. Primero, el 26 de marzo del 2019, Matthews provocó un incendio en a la Iglesia Bautista St. Mary en Port Barre, Luisiana. Luego, el 2 de abril del 2019, Matthews provocó un incendio en la Iglesia Bautista Greater Union en Opelousas, Luisiana. Finalmente, el 4 de abril del 2019, Matthews provocó un incendio en la Iglesia Bautista Mount Pleasant en Opelousas, Luisiana. Los incendios que Matthews provocó destrozaron cada una de las iglesias. Matthews admitió que provocó los incendios por el carácter religioso de los edificios, en un intento de realzar su imagen como músico de «black metal» al copiar delitos similares que cometidos en Noruega en los años 90. Más aún, Matthews admitió que, tras prender el tercer fuego, había colgado fotografías y vídeos en Facebook que mostraban las primeras dos iglesias quemándose. Matthews admitió que había tomado esos vídeos y fotografías en tiempo real en su celular mientras se quedó viendo las iglesias quemarse y que los había colgado en Facebook en un intento de realzar su imagen en la comunidad de black metal.

«El Departamento de Justicia se mantiene firme en su compromiso a proteger el derecho al culto sin amenazas de discriminación o violencia», afirmó el Fiscal General Auxiliar de la División de Derechos Civiles, Eric Dreiband. «Matthews admitió que prendió fuego a las tres iglesias por motivo de su carácter religioso. Su conducta desgraciada vulneró los derechos civiles de los feligreses de la iglesia y dañó a sus comunidades».

«Hoy, el acusado se ha hecho responsable de la quema y destrucción de nuestras tres iglesias», dijo David C. Joseph, el Fiscal Federal para el Distrito Occidental de Luisiana. «La libertad de culto y reunión segura en nuestras iglesias es un derecho fundamental de todo estadounidense, y mi oficina y nuestras agencias asociadas del orden público lo defenderemos enérgicamente. Quisiera dar las gracias a la Agencia de Control de Bebidas Alcohólicas, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés), el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), la Oficina del Sheriff de la Parroquia de St. Landry, los Bomberos de la Parroquia de St. Landry, el Jefe de Bomberos del Estado de Luisiana, la Unidad de Delitos Cibernéticos del Fiscal General de Luisiana, la Policía Estatal de Luisiana y el Jefe de Bomberos del Estados de Florida por su trabajo intenso y colaboración continua en este caso».

«Holden Matthews tomó una decisión consciente de elegir como objetivo y destrozar iglesias dentro de su propia comunidad. Sus acciones atroces infligieron dolores y angustias graves en aquellas congregaciones, así como en toda la Parroquia de St. Landry», declaró Bryan Vorndran, el Agente Especial Encargado del FBI en la Oficina Local de Nueva Orleans. «A lo largo de esta investigación, los hombres y las mujeres del FBI, la ATF, la Oficina del Jefe de Bomberos del Estado de Luisiana, la Oficina del Sheriff de la Parroquia de St. Landry, la Fiscalía de Distrito para la Parroquia de St. Landry, la Policía Estatal de Luisiana, la Unidad de Delitos Cibernéticos del Fiscal General de Luisiana Jeff Landry y la Oficina del Jefe de Bomberos del Estado de Florida trabajaron sin tregua para llevar a Holden Matthews ante la justicia».

«Una parte vital de nuestra misión es la protección de las comunidades», comentó el Agente Especial Encargados de la ATF Kurt Thielhorn. «La ATF seguirá aportando sus recursos y experiencia a la investigación de incendios provocados en lugares de culto, los que amenazan el bienestar de nuestras comunidades. Quiero dar las gracias a todas nuestras agencias del orden público por haberse esforzado tanto en garantizar que se haga justicia».

Matthews será condenado el 22 de mayo del 2020. Se enfrenta a una pena mínima de diez años de cárcel y una pena máxima legal de 70 años de cárcel.

Este caso fue investigado por el Equipo Nacional de Respuesta de la ATF; la Oficina Satélite en Lafayette de la División Local de la ATF de Nueva Orleans; la Agencia Residente en Lafayette de la Oficina Local del FBI en Nueva Orleans; la Oficina del Jefe de Bomberos del Estado de Luisiana, la Policía Estatal de Luisiana; la Unidad de Delitos Cibernéticos del Estado de Luisiana; los Bomberos de la Parroquía de St. Landry; y la Oficina Sheriff de la Parroquia de St. Landry. El Fiscal Federal John Luke Walker, de la Fiscalía Federal para el Distrito Occidental de Luisiana, y la Abogada de Litigios Risa Berkower, de la División de Derechos Civiles del Departamento de Justicia son responsables del enjuiciamiento del caso.

Para más información sobre el trabajo del Departamento de Justicia por combatir y prevenir los delitos de odio, vaya a www.justice.gov/hatecrimes: es un portal único con enlaces a recursos del Departamento de Justicia relacionados con delitos de odio para la policía, los medios de comunicación, investigadores, víctimas, grupos de apoyo, y otras organizaciones y personas.